La verdad te hace libre

Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres

Juan 8:32

Dijo en una ocasión un político italiano: «Yo he descubierto el arte de engañar a los diplomáticos. Digo la verdad y nunca me creen».

Cómo han cambiado las cosas, las vueltas que da la vida… Así comenzaba una famosa canción antigua. Y qué cierto es. En el tiempo de nuestros abuelos y más atrás, creo que muchos de nosotros oíamos historias de honestidad, decir la verdad, sinceridad, ser francos, etc.

Cómo han cambiado las cosas, las vueltas que da la vida… Hoy día parece que el mejor es el más «pillo», el que consigue las cosas engañando a los demás, el falso, el mentiroso, etc. Y nos creemos más las mentiras que la verdad. Así nos va como nos va. Hoy día ya no se puede creer a nadie, ni a los políticos, ni a los famosos, ni a los… Tristemente ha muerto el sentido común.

Ya es hora de que, como cristianos, volvamos a la senda de la verdad. Ya es hora de que levantemos nuestra voz para gritarle a este mundo que, aunque los verdaderos valores se están muriendo, hay un pueblo, un grupo de personas cristianas que quieren ir por el mundo con la cabeza bien alta y diciendo siempre la verdad. Y para comenzar, debemos hacer de esa gran verdad una prioridad en nuestras vidas. La gran verdad es que Jesucristo es la respuesta a todas las preguntas que la humanidad tiene. La humanidad está esclavizada, no sabe qué rumbo tomar en la vida, y aunque da una apariencia de que lo mejor es la mentira y poder engañar a otros, sabe que eso no le lleva a llenar el vacío interior que hay en su corazón. Querido amigo lector, levántate de la siesta espiritual en la que estás adormecido y cuéntale a todo el mundo la mayor verdad que ellos puedan recibir. Y no es otra que Cristo viviendo en el corazón y mente de las personas.


Tomados del libro de devocionales del Pastor: “Meditad sobre vuestros caminos”.